Realidad aumentada
Que uno de los “booms” de este año ha sido Pokémon Go no es nada nuevo, ¿no? Ahora este fenómeno comienza a ser utilizado por multitud de empresas que buscan ofrecer una experiencia atractiva a los usuarios, por lo que se está convirtiendo en una potente herramienta de marketing que dará que hablar en el próximo año. Esta tecnología te permite interactuar con el entorno físico, ver el producto antes de comprarlo e incluso testarlo como si fuera real.
Marketing live
Ver la preparación de un evento, la confección de una prenda de ropa o el ambiente en una oficina mientras se trabaja… ahora es posible. Plataformas como Snapchat o Instagram Stories permiten realizar transmisiones en vivo y dar la opción a que muchas marcas estrechen lazos con sus clientes y muestren una faceta más cercana. Crear contenido propio y difundirlo sin gastos económicos ahora es factible y, lo más importante, eficiente.
El poder de los influencers
“Youtubers”, “Bloggers”, “Instagrammers”… traspasan la pantalla de nuestro smartphone para dar el salto a la televisión. De una inocente recomendación a una verdadera profesión incluida en las estrategias de marketing de más del 65% de las empresas, según Monetate. Lo que más se busca de ellos es que cuenten con una comunidad de seguidores fieles, que en ellos prevalezca la naturalidad y que la relación que se establezca con la marca sea cercana, pues solo así el mensaje llegará de forma más eficiente a los clientes.
Integración del e-commerce social
En este año que acaba, el smartphone se ha convertido en un auténtico aliado a la hora de impulsar ventas y aumentar engagement con la marca. Se prevé para el 2017 que las compras sean todavía más personalizadas, que herramientas como Pinterest sigan permitiendo que el contenido sea lo más segmentado posible y que la interacción con los usuarios a través de las redes sociales siga facilitando la promoción de productos y servicios.
Inteligencia artificial
En el área del Big Data, la aplicación de técnicas de aprendizaje automático y la corrección de errores desarrolladas por los robots funcionan como una tecnología sorprendente para realizar previsiones y conocer a fondo a nuestro usuario. Al fin y al cabo de lo que se trata es de diseñar contenidos personalizados que nos permitan establecer posteriormente estrategias de precio adecuadas.